por AGOSTINA VIGÑALES
El aborto se ha convertido en un tema de la agenda pública en Argentina. Los distintos medios de comunicación desempeñan una diversidad de funciones, que de modo clásico se caracterizan como informar, entretener y persuadir. Pero ésta elaboración y difusión de contenidos no se realizan en el vacío, sino que están influidas por condicionamientos de carácter no comunicativo, económicos y políticos principalmente.
El aborto se ha convertido en un tema de la agenda pública en Argentina. Los distintos medios de comunicación desempeñan una diversidad de funciones, que de modo clásico se caracterizan como informar, entretener y persuadir. Pero ésta elaboración y difusión de contenidos no se realizan en el vacío, sino que están influidas por condicionamientos de carácter no comunicativo, económicos y políticos principalmente.
Cuando
hablan de sí mismos los medios suelen presentarse como el espejo de la
sociedad, pero hoy sabemos que la imagen del espejo es falsa. No existe ningún
espejo situado fuera de la sociedad capaz de reflejar de modo objetivo lo que
sucede en ella. Las decisiones que determinan la publicación de cualquier
noticia: su ubicación, la extensión que se le asigne, el titular, la bajada, el
posible acompañamiento gráfico, entre otros, están cargadas de opinión, de
valoración acerca de la relevancia del hecho y del modo en que hay que
tratarlo.
Profesionales
en la medicina y psicología han dado su opinión acerca de la falta de
neutralidad que se percibe en los medios de comunicación. “Este es un país con mucha historia sobre la
manipulación política del tema del aborto, pero al día de hoy, adentro del
mismo país, hay controversia de provincia a provincia” opina el médico Marcelo
Fay. Además, aclara que no existe un
análisis profundo desde el punto de vista médico y legal del tema para poder
dar certezas, verdades y llegar a un acuerdo sobre cómo tomarlo puntualmente con sus verdaderos alcances y límites.
La
psicóloga Lorena Alarcón expresa que no le tiene miedo, ni le preocupa que la
influencia política se filtre en la discusión, ya que considera que esto
siempre acontece cuando se habla de dirección en los procesos sociales. Sin embargo, señala que “el uso de algunos medios para llevar agua para sus molino es indignante, más
cuando uno sabe el sufrimiento q hay cuando se interrumpe un embarazo”
Desde su mirada
profesional, ninguno deja de ser televidente, oyente y lector, y es por eso que
ellos también eligen con quienes informarse. A Lorena Alarcón en el abordaje de
este tema, le gusta seguir los trabajos de Mariana Carbajal. “Me parece lo más profesional y por ende ético que
he podido apreciar en el medio desde mi perspectiva”, aclara. Esta periodista
se encargó en el año 2009 de hacer un análisis sobre cómo trataban el tema la
prensa gráfica, y concluyó que La
Nación expresa la voz de la jerarquía
católica, militante en contra de la práctica
del aborto en cualquier circunstancia, que Página/12 es el único
que defiende abiertamente la
despenalización y/o legalización de la
interrupción voluntaria del embarazo, y que Clarín se mantiene “equidistante” frente
al tema.
Por otro Lado, el
médico Marcelo Fay dice que no hace particularmente un seguimiento, pero sí
cuando surgen casos de aborto no punible. “Muchas veces, estos casos aparecen publicados en policiales, cuando en
verdad son temas de sociedad y de salud”, afirma.
Que hoy en día la gente
disponga de información, conocimiento y argumentos no ha sucedido por arte de
magia sino por la magia de quienes han estado trabajando en este tema por
muchos años. Sin embargo, a la hora de informarse, hay que tener en cuenta que los
medios de comunicación responden a intereses de grupos económicos, políticos y
sociales cuando se aborda el tema, y por eso es recomendable no tomarlos como
una realidad, sino como un punto de vista.
Fuentes:
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